Cada uno a su casa / 16 de agosto 17:25 / Reservado

Continuacion de... "Un choque; Dos personas"

Al llegar a la casa de Alli, o esa suponía yo que era... me quité la duda - ¿Esa es tu casa? - mientras tomaba su rostro para que mire en la direccion que le mostraba yo.
¿Ella también tiene la piel caliente? Parecía mas que increíble... Pues.. ¿Todas estaban asi? ¿Yo causo eso? Reí por dentro a mi pensamiento.
La observé en cuanto su vista no estaba en la mía, era especial... y distinta, se le notaba en el rostro.. Pronto recordé a Sophie, que era tan bonita que me recordaba a mi hermana, pero porsupuesto que Leah era la mas preciosa que nunca antes había visto y la causa por la que estaba aqui en mi auto frente a esta casa y esta mujer.

Off: pobre Cole, todas las pibas que conozco son Lobas = Calientes. jajajajaj

Habíamos llegado, que lastima, no sabia que hacer si decirle que se quede o adiós, no podía perder una oportunidad como esta- si es mi casa, quieres entrar?- propuse con una sonrisa juguetona idiota parece que quieres mas de lo que debes hacer con alguien que recién conoces- digo a tomar un café, que te parece?- dije intentando arreglar la situación.

Sonreí ante su invitacion. - Que amable eres - ¿Café? ¿Había dicho café? Eso es algo a lo que nunca en mi vida me negaría - Claro claro claro - largué una risa - Amo el café - le explique mientras bajaba del auto, esperando que me imite.

Por las dudas aclaré - Quiero seciorarme que la herida esté en condiciones. Pero de todos modos no puedo quedarme mucho - A las 6 ya debía estar en Seattle y volver hasta La Push para recoger a mi preciosa niña; Leah.

Había aceptado mi invitación y yo ya era la persona mas feliz en todo el mundo, espero que el sienta lo mismo decía mi voz interior , pero nada de eso importaba porque estaba con Cole.
Bajo del auto y yo imite su gesto bajando también, nos dirigimos a la puerta, toque el timbre, pero nadie abrió, asíque decidí buscar las llaves bajo la alfombra- ahora sabes mi secreto- comente haciéndome la misteriosa Allison no te hagas la graciosa no lo eres, tonta abrí la puerta - siéntate en minutos traigo el café- dije mientras iba a la cocina a prepararlo.

- Secreto - hice una mueca de sellar los labios y guiñé un ojo.
Pasé y mientras la esperaba observaba todo detenidamente - Bonita - era muy linda casa. Oh, que no piense que fue para ella - Muy bonita la casa, bien decorada... - sonreí algo nervioso.

Ahahahahahahahahahahahah me dijo bonita, me muero. Alli contrólate recién lo conoces había una discusión en mi mente , y el contemplaba mi casa mientras yo como era de esperar lo contemplaba a el ese hombre era perfecto. Hizo un comentario sobre la decoración - si, el trabajo de mi hermana, yo soy muy mala con todo eso de ser ordenada- comente entre risas y me fui a preparar el café, cuando volví el estaba ahí parado, se veía tan lindo que lo podría congelar para que quede ahí por siempre, pero no tendría que mirarlo todo el día debía decir algo- entonces ya esta el café, espero que te guste- dije mientras nos acomodábamos para tomarlo.

Que simpática. - Yo al contrario, soy ordenado... no viciado pero mantengo el orden. Mi vida me obligo a hacerlo - Terminé con el comentario allí para evitar preguntas.
Cuando estuvimos sentados y probé el café le comenté - Muy rico niña. Felicitaciones - reí.
Venía de tomar un café pero.. este estaba delicioso, y quería que lo sepa - En serio, aún mas que el de la cafetería de la que vengo - y guiñé un ojo en forma de cumplido.

Oh por dios, le gusto mi café. Allison cualquier cosa que te diga no es para que te ilusiones ya basta! pensé.- emm, se pudiera decir que preparar café no es mi especialidad , pero me gusta cocinar un día puedes venir a probar mi comida - dije buscando otra oportunidad para verlo.
- Entonces cuéntame algo sobre ti, hombre misterioso- comente para saber un poco más de mi enamorado, sabia que era pronto pero así lo sentía.

- Pues claro que me encantaría - hice una mueca simpática con la que Danielle siempre reía y recordé el almuerzo con Leah, había sido maravilloso.
¿Misterioso?... - No tengas miedo en preguntar queridisima Alli - reí - Las preguntas siempre son bienvenidas y prometo contestar todo - hice una pose militar en forma de chiste y la miré a los ojos para intentar leerla pero me era imposible... no era como Soph que decía mucho con la mirada, Allison era mas bien algo conservada aunque la simpatía afloraba un 100%.

No era miedo a preguntar, sino que no sabia que pregunta como empezaba en ¿quieres casarte conmigo? ¿Cuantos hijos quieres que tengamos? no era la intención.
Ya lo tenia y era una pregunta fundamental- Mm, nose por ejemplo, cuantos años tienes?- pregunte para poder calcular cuantos le llevaba aunque sabia que debían ser unos 88 eres una roba cunas Allison no pude evitar reirme ante mi pensamiento y por cierto lo hice en voz alta debio pensar que estaba loca.

No encontré el chiste o la causa por la que ella se rió luego de hacer su pregunta, pero la sonrisa le sentaba bastante bien, sus pómulos se intensificaban y sus blancos dientes contrastaban con su piel oscura. Era una morena bonita sin duda, nada mas eso.
No se porqué pero tuve que comentarselo - Me gusta tu sonrisa - esperaba unicamente que no lo tomé "mal" y contesté lo que queria - Tengo casi 22 - sonreí calidamente - ¿Y tu...?.

Allison contrólate no esta bien tirarse enzima de las personas para besarlas y menos de las que recién conoces pensé luego de que opino sobre mi sonrisa.
Tenia 22 años era demasiado joven que debía decirle que tenia unos 94 años, no de ninguna manera!- 18 años , soy una pequeña niña- dije con una sonrisa ya que le gustaba - Entonces eres de la push Cole?- pregunte.

- Yo no opino que seas niña y aunque conserves el aire de pequeña aparentas muchisimo más... tal vez por tu forma de moverte, no lo sé - ¿Desde cuando decía mis pensamientos tan liberalmente?.
Una vez más sonrió, me encantaba esa sonrisa asique intentaba ser simpático para verla más.
- No, vivo en Seattle ¿Conoces? Y vengo de Phoenix.. que es un poco mas lejos. ¿Tu que me cuentas? - la invité con la mirada.

Creo que este chico era el más lindo de todos los que había visto en mis 94 años de vida y vivía cerca, eso era una buena noticia.
- Yo, bueno te habrás dado cuenta de que vivo en la push, pero soy nueva aquí, vengo de un pequeño pueblo de Singapur que seguro no conoces, estoy aquí con mi hermana ya que mis padres fallecieron- dije mientras recordaba aquellos tiempos en los que estaba con mi familia, y la melancolía venia a mi mente, como es de imaginar mis ojos se llenaron de lagrimas esperaba que el no lo note.

Pobresita - No llores linda - le dije mientras me acercaba para comprobar que llorara de verdad y tomaba su barbilla y la levantaba - A mi no me paso, pero se de muchos casos... Es dificil y tienes que ser fuerte - sequé una lágrima.
Necesitaba contención, yo ya conocía gente en ésta situacion y debían tener el doble de amor que cualquiera... para de alguna manera compensarlo. Como siempre me mostré educado y no hice nada que ella no quisiera, asique le propuse - ¿Quieres que te abraze? - y la miré de cerca, a los ojos.
Ahora si podía leer en ella la trsiteza extrema. Me daba mucha pena no poder hacer mucho...

No lo había notado y lo que menos quería era dar lastima, y al ver que el se preocupaba por mi mas lloraba, es que, me sentía querida. Me ofreció un abrazo y era lo que necesitaba- Si por favor- dije extendiendo mis brazos para recibir su abrazo.

Cuando acepto me dió ternura porque extendió los brazos cual niña pequeña y yo no hacía mas que pensar en mis hermanas y en cuanto las extraba.
La tomé por la cintura para levantarla de allí y cuando estuvimos parados dejé que hunda su cabeza en mi pecho - Empapa toda mi ropa, no hay problema - dije y luego reí. Precisaba poner algo de "humor".
Una mano la posaba en su cabeza y con la otra masajeaba su espalda entera, así era como abrazaba a mis hermanas.

Me abrazo y sentí lo que nunca antes había sentido, pero en mi interior seguía triste, estaba mal conmigo misma porque no quería dar lastima y lo único que hacia era llorar porque sentía su cariño, sentía que el me quería, y Moria de ganas de besarlo y decirle que recién lo conocía pero ya era todo para mi, pero no podía y eso me molestaba mucho - Gracias por esto, tu si sabes lo que es hacer sentir bien a las personas- dije aun en sus brazos.

- Eso no sabes cuanto me alegra saberlo - le dije mientras besaba su cabello. Ella estaba cálida, y entonces me imaginé que un abrazo de Leah se debía sentir algo asi... como había comprobado con Sophie tambien.
Ahora ambas manos las tenía en su cintura y apoyaba mi cabea en su cabeza, porque me había dispuesto a darle contension hasta que no la necesitara. La compadecía y así era mi forma de demostrarlo.

Y ahora me besaba la cabeza eso si se sentía lindo, ya no lloraba mas pero no quería soltarlo y no pensaba hacerlo, coloco cuidadosamente sus manos en mi cintura y ahí estaban en mi panza eran como 150 mariposas de diferentes colores, no sabia que hacer - gracias enserio se que te va a sonar raro porque recién te conozco pero te quiero- dije abriendo mi corazón a el hombre mas lindo del mundo.

Me separé de ella al escuchar sus palabras y me agaché hasta que nuestras caras estuvieran a la misma altura. Tomé su rostro entre mis manos y una vez mas intenté leer sus ojos: Si, decía la verdad.
Me había conmovido y le dije - Eres muy tierna Allison - Pero no le dije que la quería tal vez porque yo no era de lo más demostrativo aunque empezaba a sentir su cariño y me era contagioso. Besé su mejilla y le dije - Promete que estarás bien.

-Lo prometo- dije lugo de que el me pidio que me cuidara, lo haria aunque sabia que el no sabia que debia cuidarme de el, debia tratar de no enamorarme mas, no sabia lo que el sentia y eso me molestaba.
- No te vayas quedate un rato mas- dije al sentir que su beso fue una despedida.

- Claro, hasta que termine el café puedo. Tengo un compromiso - Ahora que lo recordaba mi cuerpo y corazón se revolucionaban al tope por el recuerdo de la hermosa Leah.
Me senté y cambié de tema de las familias y todo eso - ¿Estudias? - sonreí.

Se quedaria solo un rato, pero estar con el aunque sea tres segundos me hacia feliz- si estudio estoy en el ultimo año del instituto, y tu?- pregunte con una sonrrisa ya que sabia que a el le gustaban.

- Yo comenzaré la Universidad de Medicina en Septiembre, mientras disfruto mi tiempo libre - reí. - ¿Que te gustaría seguir a ti? - pregunté interesado. Tomé un sorbo de café.