Presentando a la Familia / 17 de Agosto 17:00Hrs / Reservado

Había estado nervioso todo el santo día. Nunca había pasado por esto, es decir, nunca había tenido una novia formal, por lo tanto las presentaciones a los padres, en este caso a su abuela y su pequeño hermano me tenían con los nervios de punta. Después de todo le presentarían al chico que estaba con su hermosa nieta, con la que pasaba todo el tiempo en que no estaba en el colegio y que casi había sido quien la convirtiera en una mujer, a la tierna, dulce, encantadora, sexy, deseable y exquisita Chiara, pero claro la abuela de ella no pensaba de igual modo como lo hacía yo, pues no sería normal. Sonreí al pensar en todas esas cosas y finalmente terminé de vestirme y salí hacia la casa de mi novia.

Sabía que entre nosotros no era necesario, pero tenía muy claro que sería este día en que le pediría formalmente a su abuela que me permitiera ver a Chiara como novio y poder ir a verla a esa casa, de ese modo me sentiría más seguro y sería yo quien se devolviera tarde a casa.

Como nuestras casas quedaban cerca me fui caminando a su casa y con una botella de vino como regalo para la cena, esperaba que yo no fuera el único que bebiera de lo contrario me sentiría mal. Finalmente había llegado al lugar indicado y ya solo debía golpear la puerta, tomé un respiro y golpeé esperando a que me abriera la puerta y solo cuando vi el rostro de Chiara me relajé un poco.

- Me tiemblan la piernas –le dije con una tímida sonrisa.

Ya mi pequeña familia estaba lista, Preston protestaba por los zapatos pero ni mi abuela ni yo le dimos permiso para quitarselos.

El timbre sono cuando les pedi encaresidamente que sean amables con Shane.

Me apresure a responder a la puerta.
Cuando lo vi, a el, la razon por la cual los latidos de mi corazon se multiplicaban, una sonrisa emergio en mi rostro.

- No te preocupes, te vere a hurtadillas si no les agradas - dije graciosa pero no sabia si con sus nervios lo entenderia asi que preferi aclarar - Es una broma, Shane, hazme el favor y respira. -

En ese momento divise una botella de vino en su mano, mi abuela era una mujer muy concerbadora y no crei que eso le gustase. Le quite la botella de su mano y la apoye detras de unos arbustos.

- Creeme es lo mejor - continue - luego la bebemos nosotros, bueno mejor tu, no soy muy buena amiga del alcohol - termine riendo - Ahora si, ¿Listo? - dije corriendome para dejarle el paso libre hacia el interior de mi casa.

Le agradecí con la mirada cuando quitó la botella de vino de mis manos, si ella creía que era lo manos, pues para mi era excelente, lo que menos quería era que su abuela creyera que de algún modo estaba llevando a su nieta por el mal camino, aunque bueno en otras cosas, yo no me podía controlar. Sonreí ante mi pensamiento, pero luego al recordad donde realmente me encontraba, mis nervios volvieron, tan o con más intensidad que antes.

Respiré tal como ella me había dicho y al toar su mano, una ola de buenas vibras y alivio me inundó y había que admitir que sus palabras me habían asustado, pero no quería preocuparle y el decirle que estaba al borde del colapso no era una muy buena idea.

- Estoy listo, es mejor salir de esto cuanto antes, así podré aprovecharme de la dulce nieta –le susurré acercándome a ella, para que esta vez fuéramos dos los nerviosos y no solo yo. Sabía que era malo de mi parte, pero debía admitir que disfrutaba de eso.

La seguí al interior de la casa y cuando entramos a la sala los vi, su abuela Madeline y el pequeño Preston, ambos con un rostro el cual no podía descifrar y en los que no podía interpretar que pensaban de mi.

- Me detestan –le susurré sabiendo que solo ella podría escucharme.

Al entrar a la sala donde mis relativos se encontraban, note que no tenian cara de muchos amigos, y sabia que Shane lo habia notado.

- Me detestan – dijo con un suave susurro a mi oido.

Me voltie y le conteste.

- No lo hacen, simplemente no te conocen, y recuerda respirar - dije depositando un beso en su mejilla.

No es que no quisiera besarlo apasionadamente como nosotros soliamos hacer, pero no me encontraba en el lugar mas apropiado para hacerlo.

Mi abuela lo examino comi si el estubiese contrabandeando algun tipo de droga y Preston,le dedico una mala cara.
Nesecitada romper el hielo.

- Familia, Shane, Shane familia - dije - La cena esta lista ¿pasamos? - le pregunte a mi abuela

- Si - contesto seca y Preston le sigio el paso. - Ahora Shane dime, ¿de donde eres, de donde viene tu familia y que intenciones tienes? - lo interrogarin entre los dos

Mis ojos se dirijieron con una mirada amenazadora a mi abuela y ella capto el mensaje.

- Bueno, comamos que Chiara ya me esta callando - le dijo a Preston y yo tome el cuchillo para cortar la carne un poco demasido fuerte antes de lanzarle otra mirada.

- Perdonala, no esta muy bien - dije dije señalandome la cabeza sarcasticamente

La tensión era tal en el ambiente que con una navaja sería fácil cortarla. Quería salir de ahí, tomar a Chiara y llevármela lejos de ese ambiente y solo dedicarme a besarla locamente, pero no, estaba ahí frente a su abuela, bombardeándome de preguntas, sin saber si debía contestar con toda la verdad. Pero debía ser así, mientras más sincero fuera, más confianza tendría aquella mujer conmigo y podría estas con calma con mi chica.

Nos sentamos a la mesa y me dejaron a uno de los lados con Chiara y la señora Madeline en cada una de las esquinas. MI novia me quedaba algo lejos pero aún así mi mano alcanzaba para provocar algunas maldades en ella por hacerme pasar por esta situación. Sonreí con malicia y luego miré a la mujer para contestar a todas aquellas preguntas que me había hecho.

- No tengo problemas en contestas señora Madeline –dije limpiando mi boca ligeramente con la servilleta- Soy de Inglaterra y mi padre vive aún allá junto a mi hermano, mi madre falleció hace algunos años y mis intenciones con su nieta son las más honestas y sinceras que puede esperar de mi –recordé cada una de las preguntas que me había hecho y respondiendo con calma y siempre con una sonrisa frente a ella- es por eso que quería aprovechar esta oportunidad, de que me diera su consentimiento para salir con su nieta, por supuesto la opinión del joven Preston, es muy importante para mi también.

Esa vez había mirada al chico frente a mi y la sonrisa en mi rostro se había borrado, no porque no me agradara, sino todo lo contrario, yo también había sido un chico y nunca me había gustado que me trataran como tal en estos casos, sino como un adulto tal como los demás. No había mirado a Chiara en todo este momento, pues quería pagarle el verla tan calmada y yo tan nervioso. Provoqué que uno de mis tenedores cayera al suelo hacía mi lado derecho.

- Dios, lo siento tanto, que despistado soy, con su permiso –me incliné para así poder recogerlo- vaya que ha caído lejos -dije desde casi debajo de la mesa. Y fue ahí donde miré las tersas piernas de Chiara, sonreí con malicia y comencé a acariciarlas con mucha calma, mi mano subía hasta llegar hasta sus muslos, pero ahí me detuve, ante un escalofrío de su parte. Me puse de mi y volví a sentarme- lo siento, había caído muy lejos.

- Oh dios - pense miantras mi hermano le clavaba la mirada a Shane como un puñal.

¿Que pensaria Shane?, - Chiara me caes bien pero prefiero mi salud fisica y mental - o sino diria - ¿Sabes?, mi padre me llamo quiere que vuelva, placer en conocerte, adios - y se tiraria de cabeza a un taxi ya con sus maletas hechas.
Yo no lo culparia. Es mas lo aplaudiria.

De los nervios, o al menos yo asi lo creia, a Shane se le cayo un tenedor.
Pensaba ir a ayudarlo cuando senti un cosquilleo en mi pierna.
Trate con todas mis fuerzas de no sonreirme mas de la que ya estaba, mi cara era del mismisimo color que el cabello de mi abuela, una pelirroja de aquellas (?).

Shane no se llevaba mucho tiempo, alli abajo pero ese segundo se me hizo eterno, luego su manito traviesa,. subio hasta mi muslo lo cual me causo una sacudida, que quize disimular con una tos.

Solte mi tenedor y baje mi mano hasta mi cadera y con una simple seña, le ordene que se colocara en su lugar nuevamente.

Preston tocio falsamente para ue todos le prestemos atencion como sucedio.

- ¿Si Prest? - le pregunte
- Shane, mi hermana es mia, es lo poco de familia que me queda y si tu le haces algun tipo de daño, sera mejor que corras lejos de mi vista, ¿oiste? - dijo muy serio

Eso me sorprendio de Preston, el no solia ser amargado y peliador. Aunque solo lo hacia para protegerme, para protegernos.

- Prest, te amo - le dije y me levante y lo abrace con todas mis fuerzas sin lastimarlo. - ¿Has oido no Shane? - le pregunte sonriente.
Luego le susurre a mi hermanito al oido - Pero sacando el caso de que es mi novio, ¿te agrada? - dije comtinuando con una informacion que le encantaria - El es una exelente jugador de luchas y no se rinde como yo. -
- ¿EN SERIO? - pregunto gritando y yo asenti en confirmacion.

Luego de un rato en la mesa y ya cuando habiamos comido todo lleve a a mi novio a nuestra habitacion en mi casa.
Apenas paso un centimetro de la puerta no lo pude evitar, necesitaba sentir sus labios contra los mios, esa increible fusion.

Me había causado gracia las palabras de su hermano y más aún lo que ella había dicho sobre mí, se había salvado de que siguiera acechándola durante la cena, o por lo menos por el momento.

- No te preocupes querido Preston, tu hermana es mi vida y jamás en la vida le haría daño, de eso tienes que estar más seguro que cualquier otra cosa –le sonreí nuevamente y continuamos con la cena. Por lo general creo que salió bien, fueron preguntas que me imaginaba las harían por lo que ya llevaba algunas respuestas hechas.

Cuando la cena terminó mi corazón se relajó cuando me invitó a su habitación, era su territorio y por los cuartos se conocía a las personas, pero cuando llegamos allá, no tuve tiempo de echar ni una mirada, cuando ya la tenía sobre mi besándome y por supuesto no me quejaría, para nada, pues tenerla entre mis brazos, era la sensación más exquisita que podría querer.

La tomé firmemente entre mis brazos y le di la vuelta para ser yo quien la tuviera contra pared, me gustaba tenerla así, sin que se quisiera escapara y tener más que claro que era solo mío. Mis manos en su cintura, sin poder evitar que mi traviesa mano se colara por debajo de su vestido para acariciar su pierna, lo sentía mucho, pero ella era una eterna tentación y debía tomar las consecuencias tal y como se daban.

- Me vuelves loco con cada palabra y no sabes lo que se siente el tu familia esté en el mismo lugar –le dije en un susurro ahogado contra su cuello- tenerte a mi lado sin poder tocarte es desesperante ¿lo sabías? –volví a callarme al juntar nuestros labios- estoy seguro que si abuela entra aquí, no me detendría a menos que me lo pidas.

Sabia que iba a reaccionar de ese modo y me encantaba.
Me encantaban sus besos.
Me encantaban sus manos alrededor de mi cintura.
Me encantaba mi nombre saliendo de sus labios con tono de deseo.
Me encantaba saber que me amaba.

Pero eso era solo para nostros dos, solo para Shane y Chiara, y a este paso, con mi notoria placer mi abuela terminaria derribando la puerta y Preston sosteniendo en su mano, los genitales de Shane. Lo castraria si lo encontraba en esta posicion. Sus piernas entre las mias y yo tenia mi cintura encastrada perfectamente sobre su pelvis.

- Shane, no debes hacer esto por dos simples razones: una, porque tu mismo me dijiste que querias que nuestro encuentro ... - asenti con la cabeza ya dandolo por entendido - sea especial y yo no le encuentro nada de especial a, mi habitacion con mi abuela y mi hermanito del otro lado de la puerta y la segunda - dije besano su cuello nuevamente. Oh dios eres mi adiccion, mi mayor droga. - Porque romperiamos todo y mi abuela tiene una cierta imagen mia, no e agradaria ser la causante de un paro cardiaco - dije imitando una cara de deprecion.

En ese preciso instante, Prest llamo a mi puerta.

- ¿Si? - dije curiosa
- Chiari, le decis a Shane si se atreve a unas luchas con el rey del oceano - dijo muy creido
- Okey, le aviso - mire al hombre de mi vida y le pregunte - ¿Te animas a enfrentar a tu cuñado sin lastimarlo demasiado? -

Sonreí ante sus palabras, definitivamente iban cosas escondidas en cada una de ellas y Chiara no se daba ni la más mínima cuenta de lo que estaban provocando en mí, lo cual era mucho, definitivamente esta chica estaba jugando con fuego y no sabía que tan cerca estaba de quemarse.

- ¿Así que romperíamos todo, qué tan salvaje puedes llegar a ser? –le susurré mordiendo el lóbulo de su oreja, pues sabía que su hermano estaba afuera y era peligroso que escuchara- no voy a negar que escucharte decir estas palabras me excita mucho, así que mide tus palabras señorita –la presioné un poco más ante la puerta antes de decir en voz alta, casi sin dejarle respirar- ya voy Preston así que baja y espérame ya voy –escuché los pasos del chico bajar la escalera y le volví a susurrar a Chiara- compórtate cariño, no querrás que me ponga travieso.

Y dejándola así, abrí la puerta y bajé hacia donde estaba Preston, esperándome.

Las palabras de Shane me sacaban de mis casillas. Yo no era la que llevaba el control, si fuera asi ya todo se habria ido al demonio, pero esta vaz era necesario, yo debia imponer la disciplina.

Cuando mordio mi extremo de la oreja decidi que era tiempo de alejarlo un poco, al menos por ahora.

El y Preston se llevarian a la perfeccion, hobres juntos con peleas, ese era su idioma, el de mi hermanito y mi lobo.

- Shane va a jugar y luego lo acompaño a su casa Prest - le avise, para que sepa que no se debia demorar demaiado.

La verdad era que cualquier tarde podrian jugar pero yo queria todo de el en ese momento

Cuando bajé, el hermano de Chiara me estaba esperando en posición para pelar, en cuanto aparecía en la sala, él se abalanzó sobre mi y comenzó a golpearme, claro sus golpes eras suaves, comparado con tu tamaño y pues yo era Lobo entonces eso no me causaba nada. Jugamos cerca de una hora, en la que increíblemente ganó en cada una de las peleas que compartimos. Chiara solo reía y su abuela me miraba con el ceño fruncido, pero aún así una mueca parecida a una sonrisa apareció en sus labios.

Cuando ya encontré que era una hora decente para partir, paré la lucha, di por ganador a Preston y comencé a prepararme para partir. No sin antes acercarme a La señora Madeline para pregúntale aquello que más me había llevado a ir a esa casa.

- Señora Madeline –le hablé- se que para usted Chiara es tan importante como para mi y que ella la ama mucho, por lo tanto para ella y para mi es esencial que usted nos de su consentimiento para salir. Amo a su nieta y le prometo cuidarla con mi vida.

La miré con mi mejor sonrisa y esperé su decisión.

Cuando Shane libero mesas palabras de su boca quede shoqueada, sabia que ha eso habia venido el, pero nose me parecio raro, era la primera vez que un caballero hacia eso por mi.

- POR ESO - rspondio mi mente - el es un hombre, tu solo has tenido unos niños -

No me queje, estaba completamente de acuerdo.

Mi abuela, abrio la boca y mi corazon empezo a correr una carera con un ferrari.

- Si, - dirigio su mirada hacia mi - tienes muy buen gusto: es apuesto y caballero, no quedan muchos asi - volvio su mirada a el - Pero te estare obserbando asi que no pìerda la linea -

Luego Preston agrego.

- Eres debil - alegando a las luchas y yo reia al son de Shane- pero me agradas -

- Bueno - dije - dicho todo esto voy a acompañar a mi novio a su casa -

- Chiara cuidado, eres una doncella - dijo mirando fijo a el perfecto hombre a mi lado

- ABUELA - grite totalmente sonrojada me voltee y segui hacia la puerta arrastrando a Shane

Por unos instantes quedé sin respiración al escuchar lo que la abuela de Chiara había dicho. Pero luego mi mente me hizo relajar, pues no había manera que aquella mujer supiera lo que estuvimos a punto de hacer en mi casa y de lo que habíamos estado hablando hace unas horas en la habitación de mi novia.

- Muchas gracias señora Madeline, y la verdad es una suerte que su nieta me hubiera elegido, pero no debe preocuparse, respeto mucho a su nieta –y luego para dejar de hablar ese tema desvié mi mirada a Preston- tu también me agradas, pero tranquilo no la próxima no serás siempre el triunfador.

Me acerqué a la mujer y le tendí la mano despidiéndome de ella y luego también la de Preston. Luego volví hacia donde Chiara me esperaba y tomé su mano, para salir de la casa, finalmente fuera de peligro.

- Creo que ha salido bien –dije sonriendo con tranquilidad ya finalmente y respiré con tranquilidad- ahora vamos a casa, esto me he estresado y necesito descansar.